7 de marzo de 2014

Guiño a la Filosofía Científica en Naturopatía. Hans Reichenbach

“Ante el error sólo podemos pedir una explicación psicológica, la verdad exige un análisis lógico.” Hans Reichenbach (1891- 1953)

"La razón es sustancia, así como fuerza infinita. Su propia materia infinita sustenta toda la vida natural y espiritual, así como la forma infinita, que pone a la materia en movimiento. La razón es la sustancia de la que todas las cosas derivan su ser."

La filosofía científica en Naturopatía, implica un sistema cognitivo cuyas partes coinciden, o son compatibles y esto ocurre con las diversas ramas de la ciencia experimental. El conocimiento filosófico del pasado se ha ido restringiendo a medida que crecía y se afianzaba la ciencia, quedando, sin embargo, la posibilidad de integrar todo el conocimiento existente en la forma utilizada por los realizadores de los antiguos sistemas filosóficos.

La síntesis del conocimiento es esencial, ya que existe una diferencia importante entre conocer y comprender, siempre que asignemos a la palabra “conocer” la simple disponibilidad de información parcial, mientras que asignamos la palabra “comprender” a la integración de todos los conocimientos bajo una síntesis organizada, o sistema cognitivo.

La filosofía científica pues, consiste simplemente en considerar que la filosofía es una ciencia más y que debe aplicar el método hipotético-deductivo igual que las demás.

Su objeto de estudio es la realidad como totalidad: le interesa todo aquello que sea relevante para construir nuestra visión del mundo y de nuestro lugar en él aunque le resulte prescindible entrar en los detalles concretos, que son el objeto de estudio de las demás ciencias. Por ejemplo, le interesa saber que la naturaleza funciona por causas y consecuencias, aunque no pararse a estudiar las causas y consecuencias naturales concretas.

Hans Reichenbach escribió: “Los sistemas filosóficos, en el mejor de los casos, han reflejado la situación del conocimiento científico de su época; pero no han contribuido al desenvolvimiento de la ciencia. El desarrollo lógico de los problemas es labor del científico; su análisis técnico, aun cuando a menudo se halla dirigido hacia pequeños detalles y rara vez se realiza con propósitos filosóficos, ha ampliado la comprensión del problema hasta que, con el tiempo, el conocimiento técnico fue lo suficientemente completo para poder dar respuesta a las preguntas filosóficas”.

“Los libros de texto de filosofía generalmente incluyen un capítulo sobre la filosofía del siglo XIX escrito en el mismo tono que los que tratan de la filosofía de los siglos anteriores. Este capítulo menciona nombres como los de Fichte, Schelling, Hegel, Schopenhauer, Spencer y Bergson, y comenta sus sistemas como si fueran creaciones filosóficas situadas en la misma línea de los sistemas de los periodos precedentes. Pero la filosofía de los sistemas termina con Kant, y es un error de la historia de la filosofía el discutir sistemas posteriores en el mismo nivel que los de Kant o Platón. Los sistemas anteriores reflejan la ciencia de su tiempo y dieron pseudo-respuestas cuando no podían darse otras mejores. Los sistemas filosóficos del siglo XIX fueron construidos en los momentos en que se estaba elaborando una nueva filosofía; son el producto de hombres que no se dieron cuenta de los descubrimientos filosóficos inmanentes a la ciencia de su tiempo y que desarrollaron, bajo el nombre de filosofía, sistemas de ingenuas generalizaciones y analogías. En ocasiones fue el persuasivo lenguaje de sus exposiciones, en otras la sequedad pseudo-científica de su estilo, lo que impresionó a sus lectores y contribuyó a su fama. Pero, considerados históricamente, estos sistemas podrían compararse más bien al término de un río que después de correr por fértiles tierras terminara por secarse en el desierto”

Bibliografía:
  • Rosental M. y P. Iudin. Diccionario Filosófico. Ediciones Universo, Argentina, 1973, p. 397.
  • La Biografía.com -Hans Reichenbach (1891-1953)
  • Biografías y vidas -Hans Reichenbach
  • Joaquín Chamorro Mielke (2003). Ciencia y filosofía: ontología y objetividad científica. Ediciones Akal. ISBN 9788446018308.
  • José Antonio Merino (1992). Ciencia, filosofía y existencia. Encuentro. ISBN 9788474901603.
  • Juan Arana Cañedo-Argüelles (1982). Ciencia y metafísica en el Kant precrítico (1746-1764): una contribución a la historia de las relaciones entre ciencia y filosofía en el siglo XVIII. Universidad de Sevilla. ISBN 9788474052169.
  • Alfonso Pérez de Laborda (1983). ¿Salvar lo real? Materiales para una filosofía de la ciencia. Encuentro. ISBN 9788474900934.

No hay comentarios: