17 de agosto de 2013

Análisis de la evidencia científica en Naturopatía

“Lo que sabemos es una gota, lo que ignoramos un inmenso océano” (Isaac Newton)

Los esquemas de gradación de la evidencia científica constituyen la primera etapa en el proceso de evaluación en Naturopatía. En el artículo anterior sobre Niveles de Evidencia Científica en Naturopatía se describieron propiamente los niveles de dicha evidencia y se pudo observar como tienen ciertas limitaciones, al no poder discriminar entre las posibles diferencias de calidad y rigor científico que puedan existir entre dos estudios situados en el mismo nivel de evidencia científica naturopática, por ejemplo dos ensayos aleatorizados y controlados, cuando éstos producen resultados contradictorios. 

Podría darse el caso de que un estudio de menor gradación científica presentara una mayor calidad y rigor en comparación con otro situado en un nivel superior en el esquema de clasificación. La validez interna de un estudio caso-control bien diseñado podría ser mayor que la de un ensayo controlado no aleatorizado en el que se produjera un sesgo de selección en la asignación de los salutantes.

Con el objeto de mejorar los esquemas de gradación de la evidencia científica naturopática anteriormente descritos, se propone un sistema de clasificación que tiene en cuenta además del diseño del estudio una valoración específica de su calidad. El esquema de gradación propuesto por la Agència d’Avaluació de Tecnologia Mèdica (AATM), se describe en la tabla siguiente:

Niveles de calidad de la evidencia científica. Esquema propuesto por la AATM

Nivel
Tipo de diseño
Condiciones de rigurosidad
Científica( según escala vista en el articulo anterior)
I
Metaanálisis de ensayos controlados y aleatorizados
No heterogeneidad
Diferentes técnicas de
análisis
Metarregresión
Megaanálisis
Calidad de los estudios
II
Ensayo controlado y aleatorizado de muestra grande
Evaluación del poder
estadístico
Multicéntrico
Calidad del estudio
III
Ensayo controlado y aleatorizado de muestra pequeña
Evaluación del poder
estadístico
Calidad del estudio
IV
Ensayo prospectivo controlado no aleatorizado
Controles coincidentes en
el tiempo Multicéntrico
Calidad del estudio
V
Ensayo prospectivo controlado no aleatorizado

Controles históricos
Calidad del estudio
VI
Estudios de cohorte
Multicéntrico
Apareamiento
Calidad del estudio
VII
Estudios de casos y controles
Multicéntrico
Calidad del estudio
VIII
Series clínicas no controladas Estudios descriptivos:
Multicéntrico, vigilancia
epidemiológica, encuestas, registros,
bases de datos, Comités de expertos

IX
Anécdotas o casos únicos


Esta clasificación considera en el análisis de la evidencia, además del tipo de diseño, las denominadas condiciones de rigurosidad científica que del mismo modo podemos aplicar en Naturopatía Estas condiciones permiten seleccionar, cuando se producen resultados dispares, el mejor estudio entre los de diseño similar o de igual nivel de evidencia.

El esquema de gradación de la evidencia científica propuesto en la tabla anterior es similar a los descritos en las tablas 1 y 2 vistas en el artículo anterior.

La diferencia fundamental que presenta, aparte de la inclusión de las condiciones de rigurosidad, es la consideración del metaanálisis como el diseño de mayor rigor científico.

Esto se debe a que el metaanálisis puede presentar la mejor combinación de validez interna u homogeneidad del diseño y validez externa o capacidad de generalizar los resultados a la población general. A pesar de sus ventajas, el metaanálisis no está exento de sesgos ni limitaciones.

En el caso del metaanálisis o revisión cuantitativa, las condiciones de rigurosidad señalan un mayor rigor científico si se analizan datos de salutantes de forma individual –megaanálisis– se tienen en cuenta las posibles diferencias entre estudios -metarregresión– los estudios incluidos son homogéneos y consistentes con respecto a los resultados, los ensayos seleccionados han sido valorados mediante un protocolo de calidad y los resultados obtenidos se han confirmado por más de un método de análisis estadístico. En el caso de que los estudios naturopáticos seleccionados para el metaanálisis fueran heterogéneos o de baja calidad, habría que plantear la posibilidad de que el rigor científico y la calidad de un único ensayo aleatorizado y controlado fuera mayor que la del metaanálisis.

Hay que tener en cuenta la heterogeneidad en el nivel de calidad de los ensayos controlados y aleatorizados.

Las restantes categorías del esquema de gradación propuesto en la tabla anterior distinguen el mayor rigor científico de los diseños que presentan una mejor combinación de validez interna y de validez externa.

Un poder estadístico que avale la significación estadística de los resultados, la asignación aleatoria de la intervención a evaluar y la presencia de un grupo control concurrente indican un mayor control del sesgo y del error sistemático en el diseño del estudio naturopático y, por lo tanto, una mayor validez interna. La valoración del estudio naturopático se complementa con el análisis de la calidad del mismo con respecto a diferentes factores relacionados con el tipo de diseño y la metodología del análisis estadístico.

Bibliografía
  • Granados A. La evaluación de tecnologías médicas. Med Clin (Barc)1995; 104: 581-585.
  • Canadian Task Force on the Periodic Health Examination. The PeriodicHealth Examination. Can Med Ass J 1979; 121: 1.193-1.254.
  • Wolff SM, Battista RN, Anderson GM et al. Assessing the clinical effectiveness of preventive maneuvers: analytic principals and systematic methods in reviewing evidence and developing clinical practice recommendations. A report by the Canadian Task Force on the Periodic Health Examination. J Clin Epidemiol 1990; 43: 891-905.
  • U.S. Preventive Task Force. Guide to clinical preventive services: an assessment of the effectiveness of 169 interventions. Baltimore: Williams and Wilkins, 1989.
  • Goodman C. Literature Searching and evidence interpretation for assessing health care practices. Estocolmo: The Swedish Council on Technology Assessment in Health Care, 1993.
  • Álvarez-Dardet C, Bolúmar F, Porta-Serra M. Tipos de estudios. MedClin (Barc) 1987; 89: 296-301.
  • Fowks FGR, Fulton PM. Critical appraisal of published research: introductory guidelines. Br Med J 1991; 302: 1.136-1.140.

No hay comentarios: